Luego de varios meses de inactividad, primero por lesiones y luego por su renuencia a vacunarse, Irving anotó 22 puntos en la victoria de sus Brooklyn Nets sobre los Indiana Pacers.
El polémico base ratificó así su postura negacionista, avalada por los Nets al aceptar su regreso como jugador parcial, pues no podrán contar con él en los partidos como local.
Luego de 35 partidos, la franquicia neoyorquina cedió al boicot de Irving para darle más minutos de descanso a sus estelares Kevin Durant y James Harden, sobre-exigidos de cara a playoffs.
Además, el regreso del jugador de 29 años fue defendido por el entrenador Steve Nash, tras las recurrentes bajas que forzaron a realizar múltiples contratos de 10 días.
Irving alegó razones personales y de libertad individual para justificar su actitud, que le impedirá jugar como local, porque el estado de New York exige estar vacunado para ingresar a estadios.
La vuelta de Irving dividió a la opinión pública entre quienes la deseaban por su calidad como jugador, y quienes la rechazan por el precedente que sienta en tiempos de rebrote de la pandemia.
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