El 5 de enero pasado el país caribeño comenzó a aplicar un control más férreo en sus accesos fronterizos ante la tendencia creciente de casos positivos de Covid-19 y la secuenciación en 11 provincias de la variante Ómicron.
Entre las acciones destaca la obligatoriedad de presentar un resultado negativo de PCR, realizado como máximo 72 horas antes del viaje, así como el esquema completo de vacunación.
De acuerdo con el Ministerio de Salud Pública, los viajeros procedentes de Sudáfrica, Lesoto, Botswana, Zimbabue, Mozambique, Namibia, Malawi y Eswatini deberán, además, realizar una cuarentena obligatoria por ocho días en un hotel destinado al efecto.
Los pasajeros de cruceros y embarcaciones de recreo presentarán un certificado internacional de vacunación.
En territorio nacional, se propone el ingreso en instituciones de salud de todo viajero positivo a la enfermedad, así como el aislamiento de los contactos en centros habilitados o en el hogar, siempre que existan las condiciones necesarias y se garantice el cumplimiento de esta medida.
El Gobierno de Cuba llamó a la disciplina, responsabilidad individual y a la correcta implementación de los protocolos de salud ante la tendencia creciente de casos.
En reunión con los científicos del país, el decano de la Facultad de Matemáticas de la Universidad de la Habana, Raúl Guinovart, aseguró que la nación antillana está entrando en nuevo rebrote, con mayor incidencia en el occidente.
Mientras, Cuba continúa con la dosis de refuerzo y las autoridades aseguran que para febrero toda la población vacunable debe estar inmunizada con esta aplicación.
El presidente del país, Miguel Díaz-Canel, dijo que la nación enfrenta este repunte en condiciones diferentes al anterior y destacó que el 20 por ciento de la población ya tiene su dosis de refuerzo.
«No hay que volver a las medidas de otro momento porque tenemos mejores índices de inmunización, pero sí debemos mantener las medidas higiénico- sanitarias y la exigencia en el cumplimiento de nuestros protocolos», enfatizó.
Díaz-Canel consideró que la isla puede superar este rebrote, «lo que nos permitirá ir avanzando en resolver los complejos problemas económicos y sociales del país».
Durante esta semana el mandatario visitó además la provincia de Ciego de Ávila donde interactuó con pobladores de una comunidad vulnerable en transformación y los instó a una mayor participación popular en ese proceso.
Luego de recorrer otros puntos de interés socio-económico en el territorio, se trasladó hacia a Camagüey (centro) para presidir la Asamblea de Balance del Partido Comunista de Cuba en el municipio de igual nombre.
En esa reunión subrayó la importancia del trabajo político e ideológico de la organización y resaltó los aprendizajes de la nación antillana en 2021.
Por otra parte, en esta semana diversas generaciones de cubanos reeditaron la Caravana de la Libertad, liderada en 1959 por Fidel Castro y miembros del Ejército Rebelde para celebrar junto al pueblo la victoria del triunfo revolucionario.
La ruta de más de mil kilómetros desde Santiago de Cuba a La Habana estuvo marcada por actos políticos-culturales en todo el país para homenajear a los héroes y reconocer a trabajadores destacados.
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