Durante una cumbre extraordinaria la víspera en Accra, la capital de Ghana, el organismo subregional congeló los activos del país en el Banco Central de los Estados de África Occidental al considerar que las autoridades golpistas incumplieron el calendario electoral para entregar el poder a los civiles.
La respuesta de Bamako, leída en la televisión nacional por el portavoz del cuerpo castrense coronel Abdoulaye Maiga, se produce después que la Cedeao anunció la retirada de los embajadores en Bamako, así como el cierre de las fronteras aéreas y terrestres con el país.
Mali sufrió en menos de un año dos golpes de Estado, el vigente bajo la conducción del coronel Assimi Goita, quien primero prometió comicios para el mes próximo y la semana pasada dijo que se mantendrían en un gobierno de transición por los próximos cinco años.
La reunión extraordinaria de este domingo, destinada a examinar la situación en Malí, es continuidad de la decisión de los jefes de Estado de la Comunidad de imponer un embargo que incluye la suspensión de casi todo el comercio y la ayuda financiera hasta la publicación de un nuevo calendario.
Las sanciones se adoptan a raíz de que recientemente la Junta militar pidió un plazo de cinco años, a partir del 1 de enero, para la celebración de elecciones presidenciales y legislativas, lo cual fue rechazado por el ente subregional, el cual integran 15 países, al considerar que es demasiado tiempo.
Además de una creciente inestabilidad política, social y económica en medio de la Covid-19, esta nación del Sahel es afectada por la violencia derivada de la presencia de grupos radicales islamistas, entre ellos el Estado Islámico.
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