Aumentamos los recursos para proteger estas instalaciones, en particular, equipándolas con medios de videovigilancia, expuso durante una visita a la iglesia de Saint-Germain-l’Auxerrois, en la localidad de Romainville, en la Región Parisina, afectada por acciones delincuenciales el fin de semana.
También en Bondy, en el propio departamento de Sena Saint-Denis, un templo fue escenario de actividades ilícitas, hechos que en ambos casos desencadenaron investigaciones para identificar a los autores, señaló el funcionario.
El dinero dedicado a proteger iglesias del país proviene de la secretaria del Comité Interministerial de Prevención de la Delincuencia y la Radicalización.
Según datos oficiales, entre enero y octubre del año pasado, mil 380 acciones antirreligiosas tuvieron lugar en Francia, desde ataques físicos hasta profanaciones.
Aunque la cifra representa una baja del 17 por ciento en relación con idéntico período de 2020, existe preocupación por la seguridad de los centros de culto y de las personas que los visitan.
Los actos hostiles tuvieron como blanco a cristianos, judíos y musulmanes.
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