Indicó su comunicado al respecto que ese dato llegaría en ese período a 2,8 por ciento, en el ejercicio que concluye el 31 de marzo. La previsión anterior, formulada en octubre, era del 3,4 por ciento.
Al mismo tiempo, el regulador elevó casi un punto, del 2,9 al 3,8 por ciento, la proyección del crecimiento del producto interno bruto (PIB) en el año fiscal 2022 que comienza el 1 de abril.
El BoJ señaló que la tasa de crecimiento proyectada para el ejercicio de 2021 es menor debido a las restricciones en la oferta, pero la del ejercicio de 2022 es mayor, principalmente gracias a las medidas económicas del gobierno.
Otro de los factores para este año es una remontada de la producción para satisfacer la demanda.
Con respecto a los riesgos que podrían empañar las perspectivas, el regulador señala que la evolución de la pandemia de la Covid-19, y su impacto en las economías de Japón y otras naciones siguen mereciendo atención.
Por demás, el BoJ revisó al alza sus expectativas de crecimiento de la inflación para 2022, mientras recorta su previsión para el pasado ejercicio como consecuencia de los problemas de oferta que afectan a la economía mundial.
En cuanto a la evolución de los precios, el banco central nipón confirmó su estimación para 2021 en el cero por ciento, pero revisó dos décimas al alza la de 2022, hasta el 1,1 por ciento, y elevó una décima la expectativa para el año que viene, hasta el 1,1.
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