Los expertos advierten que la sesión parlamentaria de este domingo, convocada en el club Bosques de Zambrano de Tegucigalpa, sumerge a la nación centroamericana en una profunda crisis política y división, a cuatro días de la juramentación de Xiomara Castro.
Luego de la comprobación del quórum y con la aprobación de 19 legisladores de Libre, 15 del Partido Liberal, 44 del Nacional y uno del Anticorrupción, los presentes ratificaron también la permanencia de Yahvé Sabillón, en la vicepresidencia del hemiciclo, y a Beatriz Valle como secretaria.
Si bien los tres integrantes de la junta directiva ya no forman parte de la militancia de Libre acusados de traición, Cálix señaló que mientras permanezca en ese poder gubernamental “no habrá ningún golpe de Estado en contra de la presidenta electa por los hondureños”, como ya sucedió con Manuel Zelaya en 2009.
En declaraciones después de su juramentación, aseguró que trabajará en el cumplimiento de la agenda de la mandataria, su plan vinculado a la transformación del país y “no esperen confrontación y pleito, aquí solo existirá ganas de sacar a Honduras adelante”.
A su juicio, derogarán las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE), la Ley de Secretos, el Código Penal de la impunidad y aquellas legislaciones nocivas para el pueblo y contribuirán desde el Congreso Nacional a la paz y la reconciliación de ese territorio centroamericano.
Desde la noche de este sábado y convocados por Castro, los ciudadanos protagonizan una vigilia en los predios de ese órgano estatal, contra los negocios del crimen organizado, la corrupción y el narcotráfico que representan al actual presidente Juan Orlando Hernández.
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