De acuerdo con el alcalde de la localidad, Sam Liccardo, los fondos que se recauden gracias a la nueva ley se destinarán a apoyar «iniciativas para reducir la violencia y los daños causados por la violencia armada.»
El consejo de la urbe votó a favor de ambas medidas, cuyo objetivo es reducir el riesgo de daños causados por la industria armamentista y aliviar al Gobierno local del coste financiero de la violencia armada.
La ciudad aprobó por abrumadora mayoría las medidas a pesar de la oposición de los propietarios de armas, que dijeron que estas violarían sus derechos de la Segunda Enmienda y prometieron demandarla.
Se espera que la tasa sea de unos 25 dólares, explicó la filial de la cadena nacional NBC News de San Diego.
Mientras tanto, el seguro de responsabilidad civil alentará a los propietarios de armas del territorio a tomar medidas de seguridad, entre estas utilizar cajas fuertes para armas, instalar cerraduras de gatillo y tomar clases sobre el uso armas.
Los ciudadanos que no adquieran un seguro, sin embargo, no perderán sus armas ni se enfrentarán a cargos penales bajo las nuevas normas.
«Gracias a mis colegas del consejo que siguen mostrando su compromiso con la reducción de la violencia y su devastación en nuestra comunidad», dijo Liccardo.
Las nuevas medidas, agregó, ayudarán a construir un camino constitucionalmente compatible para mitigar el sufrimiento innecesario causado por las armas de fuego en nuestra comunidad.
El alcalde de San José alentó a las autoridades de otras ciudades californianas y al resto del plaís para que reproduzcan estas iniciativas.
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