Al intervenir en el espacio La hora del Gobierno, en sesión plenaria de la Duma Estatal (Cámara Baja del Parlamento), el alto funcionario manifestó que Estados Unidos y sus aliados europeos olvidaron por completo la cultura de la diplomacia, mientras redoblan sus esfuerzos para contener a este país.
“Además de las medidas unilaterales ilegítimas, también intensifican la presión político-militar sobre Rusia. Basta con ver las maniobras militares cada vez más provocativas cerca de nuestras fronteras”, apuntó el canciller ruso.
Expresó que de tal forma “arrastran” también al Gobierno de Kiev a la órbita de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), le suministran armas letales y lo empujan a realizar provocaciones directas contra Rusia.
Según Lavrov, en tal contexto suenan especialmente cínicas las exigencias de detener los ejercicios militares rusos en su propio territorio, “a los que tenemos pleno derecho indiscutible”, subrayó.
En su opinión, los países de Occidente, dirigidos por Washington, intentan oponerse al curso objetivo de la historia y buscan asegurar su propia ventaja.
Advirtió que Moscú reprimirá con firmeza los intentos de trasladarle la responsabilidad por el incumplimiento de los acuerdos de Minsk para la solución pacífica del conflicto en el sueste de Ucrania y de convertir a Rusia en parte del problema.
El jefe de la diplomacia rusa reiteró que la posición de su país sobre la situación en Donbass no ha cambiado: la crisis interna ucraniana solo puede superarse mediante la aplicación coherente y rigurosa de los acuerdos de Minsk en su totalidad, dijo.
“La clave del éxito aquí es establecer un diálogo directo entre las partes del conflicto: Kiev, Donetsk y Lugansk”, apuntó.
Lavrov enfatizó que Moscú, de forma constante, hace llamados a Estados Unidos, Francia, Alemania y otros países occidentales con influencia sobre Kiev, para que le exijan la aplicación rigurosa de los acuerdos de Minsk.
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