Se espera que la helada comience a última hora del viernes a medida que la tormenta se intensifique frente a la costa.
A lo largo de la noche, se pronostica se fortifique rápidamente el temporal sobre el Atlántico, aumentando el riesgo de fuertes vientos e inundaciones costeras.
Sobre la trayectoria de la tormenta, los meteorólogos ofrecen una amplia gama, mientras la incertidumbre es especialmente alta para ciudades como Filadelfia y Nueva York.
La oficina del Servicio Meteorológico Nacional en Nueva York estima que caerán entre 15 y 20 centímetros de nieve en toda su zona de previsión entre el viernes y el sábado.
«Existe una mayor incertidumbre de pronóstico de lo habitual con la pista de esta tormenta, y el eje de las nevadas más intensas puede cambiar en las actualizaciones posteriores del pronóstico», explicaron los científicos.
El sábado será el día de mayor impacto, con nevadas intensas y fuertes vientos que se esperan especialmente para las localidades desde el este de Long Island hasta la costa de Nueva Inglaterra.
Según la previsión actual, lo más probable es que la nieve termine a primera hora de la tarde del 29 de enero desde Filadelfia hasta Nueva York y alrededor de la medianoche para Boston. El fenómeno meteorológico estará fuera de la costa de Maine a principios del domingo.
El Servicio Meteorológico Nacional de Boston señaló la posibilidad de acumulaciones totales de nieve de ocho a 17 pulgadas y vientos que podrían alcanzar las 60 millas por hora, especialmente en Cape Cod.
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