El incidente ocurrió en la zona de Piedra Fina, donde la erosión ha causado daños severos en el OCP y en el edificaciones de la empresa pública Petroecuador.
Según explicaron directivos del oleoducto en un comunicado, la rotura se registró en una zona donde el tubo no se encuentra directamente expuesto a los ríos.
Una vez confirmado el accidente, la empresa activó su protocolo de emergencia y de inmediato comenzó las labores de remediación, orientadas a evitar daños ambientales.
Asimismo, expertos evalúan la magnitud del daño en la infraestructura y preparan las reparaciones correspondientes.
OCP confirmó que no se ha suspendido la recepción ni las exportaciones de petróleo.
Con el flujo de crudo ya controlado, también se trabaja de manera intensa en evitar cualquier riesgo de que alcance fuentes de agua.
Las labores se llevan a cabo en coordinación con la población donde ocurrió la afectación, así como con las autoridades locales.
El perjuicio ocurrió a un mes del reinicio de operaciones de OCP, luego de afectaciones en otro tramo de tubería, por la erosión del río en la localidad de Piedra Fina.
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