Según estadísticas aportadas por el Observatorio Paraguayo de Drogas, la mayor parte de las mil 307 personas atrapadas por estas actividades ilícitas en el periodo de agosto de 2018 al cierre de enero de 2022, tienen entre 21 y 30 años (34,8 por ciento), seguido por el grupo de 31 a 40 años (22,9).
Esta cifra refleja que el narcotráfico en el país se nutre principalmente de la fuerza joven para sus operaciones criminales, destacó la Senad citada por la Agencia de Información Paraguaya.
Significó que la franja de edad comprendida entre los 14 y 20 años concentra al nueve por ciento de las detenciones, lo cual indica la precocidad con la que adolescentes y jóvenes se inician en este mundo criminal.
En cuanto a la nacionalidad de los apresados son paraguayos el 87,8 por ciento, brasileños el 8,8, además de 13 argentinos y 10 bolivianos.
Por sexo el 79 por ciento son varones y el resto mujeres, y estas últimas participan esencialmente en el microtráfico de estupefacientes.
A inicios de febrero el presidente paraguayo Mario Abdo Benítez reconoció que el crimen organizado permea todas las instituciones desde el Gobierno, Parlamento y la Policía Nacional, así como otros estamentos de la sociedad, y esta situación es algo que no se puede negar, dijo.
Remarcó que su Gobierno está comprometido en reforzar la lucha contra el crimen organizado y que eso se refleja en las incautaciones récord obtenidas en los últimos tiempos, lo que, según afirmó, genera mucha movilidad debido a la caída de los líderes criminales.
Datos publicados muestran que desde agosto de 2018 la Senad ha realizado mil 909 operativos, entre incautaciones de drogas y desmantelamiento de estructuras criminales, con un perjuicio económico de 581 millones de dólares al crimen organizado.
En ese periodo se marcó récord en incautación de cocaína, al alcanzar las 11,2 toneladas, a lo que se sumó la destrucción de estructuras logísticas y la ejecución de operativos contra el crimen organizado, narcomenudeo, lavado de activos y delitos conexos.
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