En una carta enviada por el canciller Jean Victor Généus a las representaciones diplomáticas, el ministro aseguró que se trata de acusaciones falsas y “maniobras desesperadas” para confundir la investigación, además de constituir una campaña de desinformación destinada a derrocar al jefe de Gobierno.
El martes CNN afirmó que Henry “está conectado y es amigo del autor intelectual del asesinato. Lo planearon con él. Ariel es el principal sospechoso del asesinato de Jovenel Moïse, y él lo sabe”, reveló el medio citando una grabación del juez Garry Orélien, quien hasta hace pocas semanas estuvo al frente de la investigación.
Antes, un reporte de The New York Times informó que el abogado Joseph Felix Badio, señalado como uno de los autores, y Henry se reunieron al menos en dos ocasiones en la residencia oficial de este último, a pesar de que sobre el letrado pesa una orden de arresto.
Généus insistió que las falsas acusaciones tienen el propósito de retrasar el orden constitucional, no obstante, el primer ministro sigue abierto al diálogo, y trabaja para restablecer el clima de seguridad, organizar elecciones e iniciar el plan de recuperación y reconstrucción del sur de la península tras el terremoto.
Además de los medios internacionales, AyiboPost -una plataforma haitiana de investigación- tuvo acceso a una grabación de Orélien entre octubre y noviembre pasados, en la cual confiesa que Henry estuvo relacionado con “la locomotora, el iniciador del magnicidio que es su amigo y que planeó el día del magnicidio con él”, en referencia al abogado Badio quien se encuentra prófugo de la justicia.
“Ariel estaba en estrecha comunicación con Laguel Civil que es otro iniciador, cómplice y autor”, continúa Garry Orélien en la grabación citada por AyiboPost.
La primera denuncia sobre el presunto vínculo entre Badio y Henry lo reveló la Red Nacional en Defensa de los Derechos Humanos en agosto, cuando sacó a la luz las conversaciones telefónicas durante la jornada del magnicidio.
El primer ministro, por su parte, negó en varias ocasiones su implicación en el complot y reiteró su intención de llevar a los responsables del crimen ante la justicia.
El exmandatario fue asesinado el 7 de julio, aparentemente por un comando armado integrado por exmilitares colombianos. Pese a que cerca de 40 personas se encuentran detenidas todavía hay más preguntas que respuestas.
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