La iniciativa busca ayudar a estimular las inversiones en energía, agua, gestión de residuos, transporte, logística y edificios ecológicos para beneficiar a personas y empresas en Bangladesh, Bután, India, Maldivas, Nepal y Sri Lanka.
Bajo el nombre Aceleración de la Infraestructura Inclusiva y Adaptada al Clima en el Sur de Asia, la UE implementará el proyecto en cinco años (2021-2026).
El plan a cargo de la Corporación Financiera Internacional (IFC, por sus siglas en inglés), es un alivio económico para la región, pues el impacto de la Covid-19 en este tipo de emprendimientos fue generalizado y severo.
Los compromisos de inversión en infraestructura con participación privada en 2020 se redujeron en un 52 por ciento, en comparación con los niveles de 2019.
Según el director regional de la IFC, Héctor Gómez, los países del sur de Asia pueden desbloquear más de tres mil millones de dólares en oportunidades de inversión climáticamente inteligente.
Será fundamental atraer capital privado para esa infraestructura de manera sostenible e inclusiva para la recuperación posterior a la pandemia de Covid-19, dijo.
El programa también apoyará el desarrollo de programas climáticamente inteligentes en agricultura, manufactura, turismo, salud y educación mientras se enfoca en temas clave como ciudades, género y finanzas verdes.
Igualmente, apoyará el desarrollo de capacidades de los sectores privado y gubernamental para mejorar su capacidad de diseñar, estructurar e implementar esos proyectos.
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