El portavoz del Ejecutivo Zoltán Kovács calificó de «ridículas y sensacionalistas» tales afirmaciones que se derivan de palabras de Orbán en las que el jefe de Gobierno instó a la tolerancia, a pesar de la «alienación cultural» que le atribuyó a Bruselas, según la prensa nacional.
Las relaciones entre la UE y Budapest no transitan por un buen momento debido a reclamos desde el ente comunitario relativos a la libertad de expresión y leyes nacionales que, según el bloque integracionista, coartan el accionar de jueces y magistrados en este país.
En ese escenario, el Tribunal de Justicia de la UE decidirá este miércoles sobre los recursos presentados por Hungría y Polonia contra el mecanismo de protección del Estado de Derecho aprobado por Bruselas en diciembre de 2020.
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