El magistrado Jorge Chávez tomó la medida a tres meses de cumplirse los tres años de prisión domiciliaria impuestos en 2019 a Kuczynski por presunta corrupción.
Al exmandatario se le investiga por su presunta intervención a favor del otorgamiento a la empresa brasileña Odebrecht, del contrato de construcción de dos tramos de una carretera que va desde el sur de la costa peruana hasta Brasil.
La libertad con comparecencia dictada prohíbe al exgobernante neoliberal salir de Lima sin autorización judicial y comunicarse con imputados o testigos del caso.
Deberá además acreditar su presencia en la ciudad cada 30 días y presentarse ante autoridades fiscales y judiciales cuando sea requerido, además de pagar una caución de 50 mil soles (12 mil 850 dólares).
Chávez dictó similares restricciones a los exministros incluidos en la investigación, René Cornejo y José Ortiz, a quienes, al igual que Kuczysnki, se les prohibió con anterioridad salir del país durante 12 meses.
El exgobernante fue elegido en 2016 y tuvo que renunciar menos de dos años después, en marzo de 2018, cercado por un escándalo de corrupción al descubrirse que allegados ofrecían prebendas a congresistas para que no voten por su vacancia (destitución) por el Parlamento.
El cese había sido planteado por negocios indebidos que realizó con la empresa Odebrecht, a través de una entidad financiera de su propiedad, bajo el gobierno neoliberal de Alejandro Toledo (2001-2006), del que fue primer ministro y titular de Economía.
Toledo recibió más de 30 millones de dólares como soborno de un consorcio encabezado por Odebrecht, a cambio de un contrato de construcción de la misma obra vial por la que es investigado Kuczynski y su extradición de Estados Unidos es aguardada aquí para su juzgamiento por corrupción.
rgh/mrs
