“Es hora de convertir las palabras en hechos”, la estrategia de condena ya no es viable, manifestó Rudeina en un comunicado.
El portavoz de la ANP también condenó los continuos ataques israelíes contra los habitantes del barrio jerosolimitano de Sheikh Jarrah, epicentro de la resistencia contra la ocupación.
Las acciones de Tel Aviv allí son “una continuación de la serie de crímenes en curso cometidos en todos los territorios palestinos ocupados contra nuestro pueblo, ya sea por el ejército de ocupación o por los colonos”, apuntó.
Rudeina responsabilizó al Gobierno israelí por la nueva escalada y advirtió sobre sus consecuencias para la región.
El pueblo palestino se mantendrá firme y defenderá sus derechos legítimos, subrayó.
El dirigente palestino aseguró que esos ataques no disuadirán a los habitantes de la franja de Gaza y Cisjordania de luchar por establecer un Estado palestino independiente con Jerusalén Este como su capital.
La tensión en Sheikh Jarrah escaló el pasado fin de semana tras la decisión del legislador ultraderechista Itamar Ben Givr de instalar su oficina allí, lo cual provocó airadas protestas de los palestinos.
Sheikh Jarrah ganó notoriedad internacional por las masivas manifestaciones del pasado año, cuando los tribunales israelíes reanudaron las órdenes de confiscación de viviendas de cuatro familias que residen allí desde hace generaciones.
La batalla legal y política en torno al caso devino símbolo sobre el futuro de esa parte de la ciudad, que los palestinos reclaman como la capital de su futuro Estado, una postura apoyada por la mayoría de los países.
msm/rob
