El mandatario manifestó en un mensaje de video en su canal de la red social Telegram que el país se quedó solo en la defensa del Estado.
“¿Quién está listo para luchar con nosotros? Honestamente, no veo a esa gente”, se lamentó.
Zelensky señaló que nadie le da garantías para que Ucrania pueda unirse a la OTAN. «Todo el mundo tiene miedo”, subrayó, en referencia a la operación militar iniciada ayer por Rusia en este país, ante una solicitud de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, en la región autónoma de Donbass.
“Hemos estado esperando con la puerta abierta durante mucho tiempo. Preguntamos sobre la membresía en la OTAN, no escuchamos una respuesta. Ahora necesitamos garantías legales internacionales de seguridad, una perspectiva europea clara, acciones rápidas y concretas”, apuntó.
Asimismo, agradeció el apoyo de los socios de Kiev, pero pidió que lo hagan con hechos “concretos, y no solo con palabras”.
Sin embargo, el mandatario ha destacado en los últimos meses la ayuda militar y financiera brindada a esta nación por los países occidentales, en especial Estados Unidos.
La víspera, el presidente estadounidense, Joe Biden, reiteró que Washington seguirá suministrando apoyo y asistencia a Ucrania.
El pasado 20 de enero, el canciller ucraniano, Dmitri Kuleba, informó que la ayuda militar brindada por la Casa Blanca a Kiev en 2021 fue de 650 millones de dólares, incluido un paquete adicional de 200 millones.
El funcionario subrayó que esa es la cifra más alta de asistencia en seguridad y defensa recibida por su país de Washington desde 2014, cuando ocurrió el golpe de Estado fraguado por la oposición con apoyo de Occidente.
Agregó que las autoridades estadounidenses confirmaron que continuarán fortaleciendo las capacidades de Kiev, incluso con armamentos letales.
Las declaraciones de Kuleba tuvieron lugar en el mismo momento que Moscú denunció que la militarización de Ucrania constituye una amenaza para el territorio ruso y exigió a Estados Unidos el cese de las entregas de armamentos a este país.
En más de una ocasión Rusia instó a Occidente a que cesara de contribuir con la militarización de la vecina nación y de arrastrar a esa ex república soviética a la OTAN.
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