Aunque dilatada su confirmación, apenas un día antes del cumplimiento del plazo para hacerlo, nadie en el país dudaba de que sería cadidato, favorecido por un 25 por ciento de las intenciones de voto y un 40 por ciento de popularidad, según los sondeos.
En una carta dirigida a los franceses, el mandatario dijo ser candidato para defender «nuestros valores» en un mundo amenazante y para preparar el futuro de «nuestros niños».
También pretendo inventar junto a ustedes una respuesta francesa y europea singular frente a los desafíos del siglo, subrayó.
Macron atribuyó antes la demora en formalizar su candidatura a su interés en dedicarse a abordar prioridades como la lucha contra la Covid-19 y la solución de la crisis en torno a Ucrania, sin que eso calmara a sus críticos.
Desde diversos sectores de la oposición acusaron al presidente francés de hacer campaña en su cargo, mediante viajes e intervenciones televisadas.
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