El mandatario denunció que los grupos nacionalistas y neonazis con mercenarios extranjeros, incluidos del Medio Oriente, se esconden detrás de los civiles, utilizándolos como escudos humanos.
No obstante, subrayó que la operación militar especial de Moscú en Ucrania avanza según el cronograma y aseguró que el Ejército ruso cumple todas las tareas asignadas con éxito.
Según el jefe de Estado, las tropas de la nación euroasiática crearon corredores para civiles en todos los lugares de enfrentamientos en Ucrania, pero los nacionalistas no les dejan salir.
“Nuestros militares actúan con plena conciencia de la rectitud de su causa durante la operación especial en Ucrania, incluso después de ser heridos permanecen en las filas”, advirtió.
En la reunión, señaló que se siente orgulloso de ser “parte del pueblo poderoso, fuerte y multinacional de Rusia”.
Reiteró que los militares de su país están luchando “por Rusia, por una vida pacífica para los ciudadanos de Donbass, por la desnazificación y desmilitarización de Ucrania”, para que nadie amenace al país “incluso con armas nucleares”.
Asimismo, enfatizó que nunca renunciará a su convicción de que los rusos y los ucranianos son un único pueblo, aunque, en su opinión, algunos ciudadanos del país fueron intimidados.
Putin apuntó que muchos ucranianos fueron engañados por la propaganda nacionalista nazi y de otros de sus seguidores.
Rusia inició el pasado 24 de febrero una operación militar en Ucrania, luego que las autoridades de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk (RPD) y Lugansk (RPL) solicitaran ayuda para repeler la agresión de Kiev.
Antes, Moscú reconoció la independencia y soberanía de ambos territorios y firmó tratados de amistad, cooperación y asistencia mutua con sus líderes, los cuales incluyeron el establecimiento de relaciones diplomáticas y la ayuda militar.
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