«Esta firma implica una importante inversión que considera la perforación de siete pozos, uno de ellos exploratorio”, aseguró el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, en declaraciones a la prensa.
Al expresar que 2022 es el año de la exploración y la reactivación económica del país, Dorgathen informó que el entendimiento comprende el área de Arenales, ubicado en los municipios cruceños de Charagua y Cabezas.
Comentó el empresario que si todo marcha bien y el pozo exploratorio es positivo, se logrará una renta petrolera de 423,7 millones de dólares y un incremento en la producción de gas natural de 21 millones de pies cúbicos diarios.
Agregó que la empresa colombiana es una entidad seria, que trabaja de manera eficiente y eficaz, y comenzará sus labores de búsqueda en el año 2023.
Dorgathen enfatizó en que el nuevo contrato es una muestra de que la estatal petrolera trabaja en la reposición de las reservas y en la recuperación de la producción de gas natural en el país andino-amazónico.
Mencionó como algo positivo la rúbrica de dos recientes contratos de venta de gas natural en los que se logró precios que calificó de históricos.
Uno fue en enero a 13,8 dólares el millón de BTU (equivalente a 27,8 metros cúbicos de gas y a 0,048 metro cúbico de gas natural licuado) y otro en febrero a 14,3 dólares el millón de BTU.
El contrato fue firmado este lunes en la sede de la corporación boliviana y asistió a la ceremonia una representación de la compañía colombiana encabezada por Ihamil Pablo Medinaceli.
Conacol Energy Colombia S.A.S. tiene en la actualidad otros dos contratos pendientes de aprobación por la Asamblea Legislativa Plurinacional (Parlamento de Bolivia), y es la mayor compañía independiente de exploración y producción de gas natural convencional en tierra de su país.
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