La modalidad presencial en los colegios, tras el obligado confinamiento desde 2020 debido a la Covid-19, la describió este lunes de forma sucinta el presidente de la República, Laurentino Cortizo: “Lo más difícil de estos dos años fue mantener las escuelas cerradas. Dimos el paso correcto, pero falta mucho por hacer”.
En un breve discurso en la escuela La Concepción, del capitalino corregimiento Juan Díaz, el gobernante precisó que de los tres mil 102 colegios oficiales del país, dos mil 573 están operativos.
También instó a los educadores a que enseñen a sus alumnos a pensar y resolver problemas en equipo, “que lean y entiendan lo que leen”, enfatizó; al tiempo que aseveró que el ejecutivo hará todo lo necesario para que este sea un año lectivo productivo.
Prensa Latina constató en un recorrido por varios planteles públicos y privados, la entusiasta acogida de comenzar los contenidos del período docente, dirigido a recuperar los diversos niveles de aprendizaje, perdidos en el distanciamiento en un 83 por ciento, según estadísticas oficiales.,
En la escuela bilingüe República de Chile, del corregimiento Calidonia, distrito Panamá, su directora Mireya Betancourt prefirió destacar las fortalezas de este curso: tener vida y el sentimiento de los niños por el reencuentro con sus maestros y amigos, señaló.
Estamos al 100 por ciento de la matrícula de unos 920 estudiantes, entre ellos menores con limitaciones en el habla y la audición; también cumplimos con estrictas medidas de bioseguridad y hacemos las adecuaciones pertinentes para un exitoso proceso de enseñanza.
En declaraciones a esta agencia informativa, la ministra de Educación, Maruja Gorday, explicó por su parte que la presencialidad, la nivelación en el aprendizaje y la preparación de los docentes, son los mayores desafíos de esta etapa.
Indicó que especial atención tendrán los alumnos que llegan a tercer grado de la primaria, alejados hace dos años de las aulas; y también quienes se estrenan en la enseñanza secundaria.
Velarán, además, por la calidad de las clases en las comarcas indígenas, al tiempo que expuso detalles del traslado de cientos de profesores por vía aérea toda esta semana hacia territorios de difícil acceso, como los territorios de Guna Yala y Ngäbe-Buglé.
Asimismo, subrayó que no se deben descuidar las medidas de bioseguridad al recibir hoy y también el próximo lunes en las aulas de todo el país, de manera paulatina, a más de 954 mil 232 estudiantes.
Aclaró que no es obligatorito vacunarse para que los alumnos se incorporen a las escuelas, aunque se estimula la inmunización pediátrica para enfrentar la pandemia.
También se conoció que la cartera de educación implementará mecanismos con el uso de las nuevas tecnologías para dar continuidad y acompañamiento a las clases, con énfasis en la lecto-escritura y las matemáticas.
Consecuencia del impacto económico de la Covid-19, este año las matrículas de las escuelas privadas del istmo descendieron en 15 por ciento y se registró el éxodo de unos 14 mil alumnos que migraron al sector público.
Otro de los retos del sistema es la inclusión de al menos 100 mil educandos, de acuerdo con un reciente informe del Ministerio de Educación y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia(Unicef).
Para varios analistas en la nación canalera este 2002 se asemejará más a un laboratorio, en el que profesores y alumnos van al reencuentro para juntos evaluar las huellas dela pandemia que forzó el distanciamiento y encontrar nuevas vías hacia conocimientos más sólidos.
En el colegio capitalino José Gabriel Duque, del distrito Chepo, provincia de Panamá, el niño Arán Palacios, a la altura de sus 10 años de edad, comenzará apenas a incorporar esas y otras vivencias.
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