Esa aseveración la sustentan economistas de las principales plazas, apoyados en los reportes de daños y relieve de temas como el de la energía y el petróleo, por ejemplo.
La situación sigue incierta y los inversores buscan activos refugio ante las crecientes sanciones contra Moscú.
Crece el temor a que la situación bélica en Ucrania afecte a los ya ajustados suministros de petróleo.
Rusia es uno de los mayores exportadores energéticos del mundo, y los precios subieron aún más por la posibilidad de que Estados Unidos pudiera vetar las importaciones de carburante desde Moscú.
El gigante energético Shell anunció que dejaría de comprar petróleo y gas natural ruso, además de cerrar sus estaciones de servicio y otras operaciones en el país.
Cada vez más empresas multinacionales cortan el acceso de Rusia a cruciales servicios financieros, de tecnología y de diversos productos de consumo en respuesta a la sanciones económicas occidentales.
Uno de los que interrumpió sus servicios en la nación eslava por las sanciones fue el popular servicio de video en streaming Netflix.
En el Medio Oriente, el conflicto en Ucrania agravó las divisiones regionales debido a situaciones como la guerra en Siria, grupos militares en Líbano, Iraq y Yemen.
Aunque varios países enviaron armas y equipamiento militar a las fuerzas ucranianas, los países occidentales rechazaron las peticiones de Kiev de imponer una zona de exclusión aérea sobre el país.
Sin embargo, las medidas tomadas de cierres de espacios aéreos afectan el comercio mundial con creces.
Y como colofón, el éxodo de ucranianos a países vecinos como Polonia, Rumanía y Moldavia continúa. La cantidad de personas que ya abandonaron Ucrania desde que comenzó la contienda supera 1,7 millones de personas, según la agencia de las Naciones Unidas (ONU) para los refugiados.
Este sombrío panorama tiene un impacto sobresaliente en las materias de economía, comercio y finanzas, cuando las sanciones del último segmento mencionado no solo golpean a los bancos rusos, sino a las transacciones en primer lugar europeas, y en general al planeta.
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