El conflicto entre Rusia y Ucrania, iniciado en febrero, dio lugar a cientos de medidas internacionales contra empresas y bancos de la nación euroasiática, y llevó a las aerolíneas rusas a cancelar vuelos y a las empresas mundiales de pago a suspender sus servicios en dicho país.
Muchos de los visitantes son incapaces de pagar sus cuentas o regresar a su tierra, víctimas de la anulación de la vinculación de las tarjetas Mastercard y Visa con sus cuentas nacionales.
Los miles de ciudadanos rusos están estancados en Phuket, Surat Thani, Krabi y Pattaya, cuatro provincias que son populares destinos de playa, indicó Yuthasak Supasorn, jefe de la Autoridad de Turismo de Tailandia.
Algunos pagan en efectivo y aquellos con tarjetas de UnionPay, que son emitidas por una compañía china de servicios financieros, aún pueden usarlas, pero los pagos con criptomonedas no están permitidos, aseguró.
Yuthasak expresó que el gobierno tailandés intentará ayudar paulatinamente a quienes desean volver a sus casas, mediante vuelos de retorno regulares o especiales.
La reciente crisis en Europa también afecta los planes recuperativos en el sector turístico de Tailandia, que tenía gran afluencia de turismo ruso; sin embargo, los números cayeron drásticamente luego del 24 de febrero cuando comenzó el conflicto.
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