En una audiencia informativa en el Senado de la República, Cingolani estimó inaceptable “ese precio del gas que se traduce en una especulación de ciertos intermediarios que especulan y no producen, sino realizan sólo transacciones”, vinculadas al mercado de futuros.
En ese sentido dijo que, de cara al próximo invierno, Italia deberá rellenar sus áreas de almacenamiento al 95 por ciento con 12 mil millones de metros cúbicos, lo cual significará desembolsar 15 mil millones de euros comparados con tres mil millones hace un año.
El ministro señaló que este país importa el 95 por ciento del gas que consume, con Rusia como principal proveedor con alrededor del 39 por ciento del total, y descartó motivos de preocupación a corto plazo aunque se interrumpan los suministros procedentes de esa nación euroasiática.
Cingolani apuntó que, en tal situación, los problemas podrían surgir a partir del próximo invierno y mencionó las gestiones del gobierno con varios países para reducir en alrededor de 20 mil millones de metros cúbicos las compras de gas ruso ascendentes a unos 30 mil millones de metros cúbicos anuales.
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