Por medio de un comunicado, el máximo representante de Naciones Unidas recordó la importante contribución de los servidores públicos dedicados al sistema de justicia y, durante su período de funcionamiento, de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala y su personal.
Ellos tuvieron un importante papel en la lucha por la erradicación de la corrupción en Guatemala y el fortalecimiento de sus instituciones, apuntó, y esa contribución ha sido constantemente reconocida por las autoridades locales, los defensores de los derechos humanos y la comunidad internacional.
Además, en medio de informes que cuestionan la independencia de la justicia y el enjuiciamiento penal en Guatemala, el titular de la ONU saludó el llamado de la fiscalía general de Guatemala para una visita al país del Relator Especial sobre la Independencia de Jueces y Abogados.
Justo este jueves, la Corte Suprema de Justicia de Guatemala notificó al juez Pablo Xitumul su separación del cargo con goce de salario, luego de retirarle en febrero último su inmunidad.
Según explicaron las autoridades judiciales, la medida es parte del proceso de antejuicio en su contra y durará mientras dilucide su situación legal.
Xitumul estuvo a cargo del juicio por genocidio contra el general Efraín Ríos Montt, el procesamiento de cinco militares por la desaparición de Marco Antonio Molina Theissen, el caso Dos Erres y el denominado Agua Mágica, en el que condenó a la exvicepresidenta Roxana Baldetti por corrupción.
En tanto, la víspera se conoció del exilio de la hasta entonces jueza de Mayor Riesgo D, Erika Aifán, por peligrar su vida ante amenazas y un proceso de antejuicio en marcha para despojarla de inmunidad y mandarla a prisión.
Todo esto forma parte de una estrategia de criminalización contra jueces independientes, de acuerdo con analistas y medios guatemaltecos.
La decisión de Aifán y el anuncio de su exilio en Estados Unidos no tomó a muchos por sorpresa, después de que fuera víctima de múltiples maniobras y solicitudes de antejuicio para sacarla del sistema.
Por medio de un mensaje en sus redes sociales, ella denunció un pacto en la Corte Suprema para encarcelarla y su temor a que el mismo Estado atentase contra ella si seguía en Guatemala.
En su opinión, carece de garantías suficientes para la protección de su vida e integridad, argumentos que también llevaron al exilio al jefe de la Fiscalía Internacional contra la Impunidad Juan Francisco Sandoval, tras su destitución arbitraria por la Fiscal General Consuelo Porras.
La lista se amplía con otras exfiscales y jefas del Ministerio Público, como Claudia Paz y Paz y Thelma Aldana, quienes eligieron similar camino debido a la persecución en su contra.
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