Las estadísticas muestran que en esa etapa del año proliferan ese y otros virus habituales, a los que ahora se suman la influenza y la Covid-19, añadió la directora de Vigilancia de la Salud, Sandra Irala.
El arribo del otoño y el cambio de clima incrementan en general la circulación de ese tipo de infecciones, pero con el retorno de alumnos a tareas presenciales, incluidas las clases, la situación preocupa más, señala la experta.
La enfermedad por el virus respiratorio sincitial fue la predominante antes de la llegada de la Covid-19 y la influenza en 2019, advirtió la doctora Irala.
El padecimiento genera en los menores obstrucción de los bronquios que se aprecian en síntomas como sonidos agudos desde el pecho, que pueden llegar a ser muy graves.
Para proteger a los pequeños, la especialista recomendó medidas como el lavado de manos, el uso de mascarillas, fricciones de alcohol, cubrir la boca y la nariz al toser o estornudar y la vacunación, cuando esta se requiera.
El sincitial humano es un virus de cadena simple de ARN en sentido negativo de la familia de los paramixovirus, que incluye otros virus comunes, como los que causan el sarampión y la parotiditis.
Su transmisión es por contacto con gotitas expulsadas por el enfermo al toser o estornudar, mientras el cuadro clínico comienza con catarro y tos, secreción nasal, fiebre y chillido de pecho.
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