En un comunicado, el Gobierno señaló que el encuentro resulta apremiante, pues el 31 de marzo expira el plazo dado por Moscú sobre el pago de contratos en rublos para el suministro del combustible.
Durante el encuentro en esta capital, se prevé que acudan el presidente del regulador nacional de energía Rythmistiki Archi, del operador Desfa y otras compañías gasísticas, según publicó el diario local Ethnos.
De esta forma, el objetivo de la reunión es “evaluar los escenarios alternativos” en caso del cese del suministro energético, a pesar de las afirmaciones de Moscú de que cumplirá con sus contratos a cabalidad como hasta la fecha.
Los pasados meses, la Unión Europea y sus aliados de Occidente aprobaron un grupo de medidas punitivas dirigidas expresamente a “desestabilizar la economía rusa”.
Por vez primera, las sanciones incluyen la desconexión parcial de Rusia del sistema interbancario Swift, la inmovilización de las reservas internacionales de su Banco Central y, en el caso de países como Estados Unidos y Reino Unido, el embargo sobre la importación de petróleo ruso.
Como consecuencia, el pasado 23 de marzo, el presidente ruso, Vladimir Putin, anunció que aquellos países considerados “poco amistosos” tendrían que empezar a pagar el suministro de gas en rublos y solicitó al Banco Central dar un plazo de una semana para el inicio de estas transacciones.
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