La medida que entra en vigor a partir de mañana, 31 de marzo, se extiende a las compras de los servicios necesarios para la puesta en marcha y utilización de tales programas informáticos.
Según el documento, a partir del 1 de enero de 2025 no será permitida a las autoridades públicas usar software extranjeros en las instituciones y organismos que son parte de la infraestructura de información crítica del país.
El mandatario ruso también encargó al Gobierno que en seis meses aplique medidas que garanticen el uso predominante de productos radioelectrónicos y equipos de telecomunicación de producción nacional en este tipo de instalaciones.
Asimismo, exigió la creación de un sistema de seguimiento y control sobre la implementación de este decreto, así como organizar la formación y el entrenamiento de personal listo para usar los nuevos equipos.
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