Bajo el título Música de una fuente desconocida, la muestra articula un discurso visual centrado en la manipulación que ejercen los medios de comunicación, el compromiso y la denuncia social, así como elementos de la cultura popular.
Según explicó el director del Museo, Jorge Fernández, la exhibición recuerda el legado de uno de los grandes promotores del arte contemporáneo internacional, en tanto demuestra la capacidad de las instituciones culturales para potenciar la creación e ilustrar lo mejor de la disciplina en el mundo.
Cerca de las colecciones de Egipto, de Mesopotamia y la cerámica griega del Edificio de Arte Universal, el proyecto recorre las etapas de trabajo de Polke, en tanto presenta puntos de contacto con su fascinación por la fotografía, el mundo de los píxeles y la abstracción, detalló Fernández.
De igual forma, añadió la coherencia de las piezas con el pensamiento crítico del pintor fallecido en 2010, quien se caracterizó por la ironía y la diversidad de técnicas y conceptos, así como por el uso de todo tipo de materiales, que otorgaron a sus piezas una variedad singular de matices.
Considerado uno de los mayores creadores de Europa y el mundo, Polke legó una historia de vida excelsa, destacó como fundador del movimiento del realismo capitalista y obtuvo el León de Oro en la Bienal de Venecia, Italia, en 1986.
Mantuvo siempre un postura en contra de las galerías, de los museos y el mercado del arte pero, paradójicamente, figura actualmente en las listas más selectas de la industria como uno de los creadores más cotizados.
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