El jefe de ese organismo, Mijaíl Mizíntsev, informó además que las fuerzas rusas abrirán otra ruta entre esas urbes con un punto intermedio en la ciudad de Berdiansk.
Según lo previsto, la operación humanitaria cuenta con la participación de los representantes de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y el Comité Internacional de la Cruz Roja.
El Ministerio de Defensa ruso instó a Kiev a respetar el alto al fuego y garantizar el paso seguro para los convoyes de autobuses a lo largo de la ruta acordada.
Mizíntsev manifestó su preocupación por el tramo entre Berdiansk y Mariúpol, el cual consideró peligroso por las acciones de las unidades subversivas y de reconocimiento de las fuerzas nacionalistas ucranianas que podrían realizar provocaciones contra los convoyes humanitarios.
La víspera, las tropas rusas evacuaron al territorio de Rusia a 20 mil 495 personas desde las regiones donde tienen lugar los enfrentamientos en Ucrania sin la participación de las autoridades de Kiev.
También desde las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, incluida la ciudad de Mariúpol, donde lograron evacuar a tres mil 63 personas.
En total, desde el inicio de la operación militar rusa el pasado 24 de febrero, 509 mil 425 habitantes de Ucrania y la región de Donbass, entre ellos 104 mil 807 niños, fueron evacuadas a esta nación euroasiática.
Mizíntsev advirtió que numerosos ucranianos retenidos como rehenes por los nacionalistas al servicio de Kiev siguen buscando oportunidades para llegar a territorio ruso.
Este jueves, la viceprimera ministra de Ucrania, Irina Vereschuk, informó que las autoridades de su país también tienen previsto realizar una evacuación por tres corredores humanitarios de Mariúpol, Melitópol y Energodar.
Rusia inició el pasado 24 de febrero una operación militar en Ucrania, luego que las autoridades de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk le solicitaran ayuda para repeler el aumento de la agresión de Kiev.
Antes, Moscú reconoció la independencia y soberanía de ambos territorios y firmó tratados de amistad, cooperación y asistencia mutua con sus líderes, los cuales incluyeron el establecimiento de relaciones diplomáticas y la ayuda militar.
En su discurso para informar sobre el inicio de la operación, el presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que el objetivo es proteger a la población de Donbass de los abusos y el genocidio de Kiev durante los últimos ocho años, además de “desmilitarizar” y “desnazificar” Ucrania.
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