De acuerdo a los funcionarios de los ministerios de Educación y de Asunto Sociales organizadoras del evento, el objetivo principal de los debates de los reunidos se enfocó en la búsqueda de soluciones a los problemas de la infancia resultantes de las crisis, pandemias y guerras, además de los medios de su prevención.
Los participantes recomendaron acciones para crear un ambiente de apoyo a niños pequeños, además de asegurar un psicólogo y un supervisor social en los hogares de atención familiar y círculos infantiles.
También, urgieron a la organización de cursos de apoyo psicosocial a los padres en cooperación con las instituciones de salud y asuntos sociales, para la educación correcta de los niños.
El establecimiento de centros de asesoramiento psicológico y educativo a cargo de especialistas para llegar a familias estables y sanas, psicológica y educativamente, también figuró entre las propuestas.
De igual manera, se destacó la importancia de dedicar espacios informativos en los medios de comunicación sobre temas de los derechos del niño.
La guerra en Siria que entró ya en duodécimo año afectó a una generación completa de niños que necesitan asistencia humanitaria, social y educativa.
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