A la medianoche de este lunes, fuegos artificiales anunciaron el arribo a la fecha, que los holguineros celebran orgullosos de una tierra pródiga en valores históricos-patrimoniales y una visión enfocada hacia el progreso y desarrollo económico y social.
Varias son las actividades previstas para homenajear a Holguín, entre ellas, la edición 20 del taller “La ciudad que queremos”, auspiciado por la Oficina de Monumentos y Sitios Históricos.
Una de las aspiraciones del evento teórico es declarar Monumento Local a El Yayal, sitio considerado por algunos historiadores, como el punto exacto donde se fundó el Hato; además, es el lugar de transculturación hispánica más importante de Cuba, según destacan varias investigaciones arqueológicas.
Precisamente, el 4 de abril de 1720 aquí celebran, también, el nacimiento del pueblo de Holguín, que poco a poco fue creciendo entre entre los ríos Jigüe (al oeste) y Marañón (al este) y a los pies del Cerro Bayado, elevación conocida hoy, como Loma de la Cruz.
Sin lugar a dudas, este territorio ha sido uno de los privilegiados por la historia nacional, pues fue a Cayo Bariay, en la costa norte de la provincia, a donde en 1492 Cristóbal Colón llegara a tierras cubanas.
Además, a inicios del siglo XVII, apareció en aguas holguineras la Virgen de la Caridad, Patrona de Cuba y fue esta la jurisdicción que más generales aportó a las guerras de independencia -18-, por lo cual se conoce a Holguín como la “Nodriza de la Revolución”.
A todo ello se le suma su intenso movimiento cultural, el amplísimo desarrollo turístico, así como los importantes aportes a la economía con exportaciones de relevantes rubros, de los que destacan el níquel, el tabaco y productos del mar.
La escritora Lourdes González bautizó a Holguín como provincia del universo, una condición que sus habitantes llevan siempre como estandarte en el pecho.
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