El esloveno Aleksander Ceferin y el paraguayo Alejandro Domínguez, presidentes de los confederaciones de fútbol de Europa y América del Sur, respectivamente, acudieron al histórico momento, que eleva la relación entre ambas instituciones a un nivel superior.
La creación de este espacio se debe al pacto que las dos entidades rubricaron el 12 de febrero de 2020 y prorrogaron el 15 de diciembre de 2021, con el objetivo de organizar una serie de diversos acontecimientos futbolísticos, así como cooperar en áreas como programas de arbitraje y entrenamiento.
Domínguez resaltó el significado histórico de esta inauguración y explicó que son los dos continentes con mayor tradición y prestigio en el deporte más popular del planeta.
«En la cancha somos rivales leales, pero la comprensión de que el fútbol es una fuerza poderosa para sociedades tolerantes, pacíficas y pluralistas, nos une», apuntó al dirigente suramericano.
Ceferin, por su parte, afirmó que «fue fácil construir una relación fructífera y duradera» como la que tienen las dos instituciones porque comparten «el mismo amor y pasión por el fútbol».
Entre las principales iniciativas del acuerdo se encuentra la denominada «Finalissima», un partido amistoso que sostendrán las dos selecciones campeonas de la Eurocopa y Copa América, Italia y Argentina, en el estadio londinense de Wembley el 1 de junio.
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