El llamado Paquete de Pascua de la nación teutona prevé que, a partir de 2025, se instalen allí 10 gigavatios (GW) de nueva energía eólica terrestre cada año, gracias a lo cual tendría 115 GW de capacidad en esta modalidad para 2030, abundó la fuente.
Para el caso del desarrollo de los enclaves marinos, las normativas dictaminaron nuevos objetivos de 30 GW para 2030, 40 GW para 2035 y al menos 70 GW para 2045.
Las metas propuestas, precisó la comunicación, requerirá duplicar la participación de las energías renovables en la electricidad alemana que en 2021 fue del 42 por ciento.
El gobierno ahora estima que una rápida adopción de vehículos eléctricos, la electrificación de la industria y la calefacción basada en una generación amigable con el medio ambiente conducirá a una demanda total de electricidad de 750 teravatios por hora (TWh) en 2030, detalló.
Para 2035, apuntó, el país europeo tiene como objetivo obtener casi el 100 por ciento de esta demanda de fuentes renovables.
El elemento central del Paquete de Pascua es la definición de las energías renovables como una cuestión primordial de interés y seguridad públicos, estimó Windeurope.
Añadió el reporte que para reducir el impacto del aumento de los precios de la electricidad en las empresas y los hogares, el gobierno decidió eliminar el impuesto pagado hasta ahora por el consumidor y comenzar a sufragar el apoyo a los proyectos del presupuesto federal.
Todo esto, consideró, acelerará la obtención de permisos para nuevos emprendimientos y reducirá los retrasos causados por las apelaciones legales.
El gobierno también estudia, aseveró el reporte, opciones para subastar energía eólica en combinación con la producción de hidrógeno renovable.
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