La protesta se realizó en la plaza Washington, frente a la residencia de la embajadora norteamericana aquí, Lisa Kenna.
La agrupación, recientemente creada, manifestó su pleno respaldo a “los heroicos pueblos del Donbass que resisten desde hace ocho años una feroz arremetida del gobierno genocida ucraniano, financiado y asesorado por Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte. Tras denunciar la nazificación de Ucrania, avalada por Washington y el bloque de sus aliados europeos, señaló que contra esa opresión se levantaron Donetsk y Lugansk, territorios en los que, señala el comité, se mantienen vivos el espíritu y los ideales de la Unión Soviética.
Añadió que esos pueblos dan muestras de combatividad y heroicidad, haciendo valer sus derechos a la desobediencia y la autodeterminación.
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