El dignatario eclesiástico dijo que se debe respetar la decisión de la CIDH de no liberar al exmandatario de 83 años que gobernó el país con mano dura entre 1990 y 2000 y cumple una condena de 25 años de cárcel por crímenes de lesa humanidad.
“Es un tema muy delicado, es una situación humana que tenemos que comprender; pero la ley tiene que ser para todos y hay que respetarla, aunque nos duela y sea muy duro”, expresó.
La CIDH se pronunció la semana pasada sobre la reactivación por el Tribunal Constitucional del indulto a Fujimori, que motivó duras críticas de amplios sectores que invocan el principio de que los crímenes de lesa humanidad no son indultables.
Aquel indulto fue decretado en diciembre de 2017 por el entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski y anulado por ilegal por el Poder Judicial, por lo que el reo tuvo que retornar a la prisión exclusiva que lo alberga.
La corte, a la que está adscrito el Estado peruano, pidió que este informe sobre el cumplimiento de la condena, aunque dejó abierta tácitamente la posibilidad de un indulto en caso de sufrir el preso una enfermedad grave y avanzada.
Entretanto, desde la extrema derecha, el congresista Jorge Montoya afirmó que, en vista de que el Perú está obligado a cumplir lo que dictamine la CIDH, el Gobierno debe evaluar el retiro de ese tribunal.
Montoya calificó como sumisión la decisión gubernamental de declarar antes del dictamen, su acatamiento a lo que decidiera la citada corte y sostuvo que el Gobierno es responsable de lo que llamó injusticia y sostuvo que “sobre ustedes caerá las consecuencias de la intromisión que han permitido”.
El pronunciamiento de la CIDH fue solicitado por los familiares de La Cantuta y Barrios Altos, perpetrada por un destacamento militar ilegal dedicado a asesinar a sospechosos de terrorismo, actividad a la que eran ajenas las víctimas de esos crímenes.
Esas familias se niegan aceptar la impunidad de Fujimori, aunque están dispuestas a aceptar un indulto a Fujimori que se ciña a la ley y que cumpla con el requisito de reconocimiento de su culpa y pedido de perdón a los deudos de las víctimas, entre otras condiciones fijadas por la legislación.
Fujimori tiene pendiente otro juicio como autor mediato o intelectual de una masacre similar cometida por el mismo destacamento, denominado Grupo Colina.
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