El vocero oficial de la presidencia, Nabil Abu Rudeina, anunció una reunión de emergencia en las próxima horas de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) para adoptar medidas frente a la agresión de Tel Aviv.
“La ocupación (Israel) está llevando la situación a un callejón sin salida, está jugando con fuego”, advirtió.
Por su parte, la cancillería denunció los numerosos muertos, heridos y arrestados desde el inicio de la campaña.
La afirmación del gobierno israelí sobre su deseo de mantener la calma no es más que un intento por encubrir sus verdaderas intenciones de arrastrar a la región a una espiral de violencia, y los palestinos no serán los únicos que pagarán el precio de sus resultados, alertó.
Mientras, el ministro de Asuntos Civiles, Hussein Al Sheikh, criticó el silencio de la comunidad internacional.
El ejército de Tel Aviv derrama sangre palestina a diario a la vista de todos, escribió el funcionario en Twitter.
En medio de este panorama, diversas milicias y partidos palestinos afirmaron que responderán a esos ataques.
Nuestro pueblo no tiene otra opción que enfrentar la nueva escalada mediante la resistencia, afirmó el Frente Democrático para la Liberación de Palestina.
La Jihad Islámica aseguró en un comunicado que “la continuación de los crímenes de la ocupación no proporcionará una supuesta seguridad a costa de la sangre de nuestros niños” y aseguró que habrá represalias.
En similar sentido se pronunció el líder del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) en Cisjordania, Faza Sawafta, quien llamó a la movilización general y apuntó que Israel no gozará de paz ni mientras continúe sus ataques.
Fuentes de Hamas anunciaron que las milicias palestinas en la franja de Gaza se reunieron la víspera para abordar la situación en la margen occidental, epicentro de la escalada.
El Club de Prisioneros reveló este jueves que en las dos primeras semanas de abril, las tropas israelíes arrestaron a más de 200 palestinos en Cisjordania, incluidos 30 menores.
Las autoridades israelíes presentaron la operación castrense en ese territorio como una respuesta a un ataque ejecutado la pasada semana en Tel Aviv por un palestino oriundo de la ciudad de Jenin, que causó la muerte a tres civiles y al agresor. Esa última acción fue condenada por el presidente de la ANP, Mahmoud Abbas.
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