Explicó que tales variantes son absolutamente necesarias para compensar la fuerte subida de los precios.
Fratzscher dijo a la emisora Deutschlandfunk que esa medida es relevante para mantener el consumo, pues si eso no ocurre, las empresas tendrán dificultades, el desempleo aumentará y Alemania entrará en una espiral de crecimiento cada vez más débil y de alta inflación.
En vista de la elevada tasa de inflación, las decisiones políticas deben ayudar a los ciudadanos de forma específica, reclamó, aclarando que eso ya se realizó en parte.
Reseñó que, por ejemplo, tal decisión se refleja en la ayuda para la tarifa de energía de 300 euros para cada ciudadano con empleo.
Alemania está en una situación crítica relacionada con la energía, en buena parte debido a la guerra en Ucrania y a las sanciones de occidente contra Rusia.
Con el trasfondo de la guerra en Ucrania y la consiguiente interrupción de las cadenas de suministro, es necesario un replanteamiento, en opinión del economista.
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