“La necesidad de una nueva Constitución es un reclamo legítimo de amplios sectores del país y, además, la grave crisis nos confirma que este es el momento” de hacerla posible, manifestó la hasta hace poco presidenta del Movimiento Nuevo Perú (NP).
Apoyo el referendo, al margen de que el presidente Pedro Castillo hubiera planteado un referendo sobre el tema “más como salvavidas como por convicción”, en alusión a la situación que enfrenta el mandatario por el asedio de la oposición y por errores propios.
“Sabemos que el Congreso hará lo imposible para bloquearlo, por eso es fundamental que este debate no quede secuestrado ‘en las alturas’ sino que la ciudadanía se involucre, que las fuerzas del cambio se movilicen”, advirtió.
Mendoza recordó que en la campaña electoral planteó también un referendo para que el pueblo decidiera si quiere o no una nueva carta magna, en reemplazo de la neoliberal aprobada en 1993 bajo el gobierno de mano dura de Alberto Fujimori.
“No entiendo cómo algunos se oponen a una nueva Constitución nacida de un referéndum en el que decide el pueblo. No sé cómo defienden con garras y dientes una Constitución nacida de un golpe de Estado”, expresó sobre el rechazo de la extrema derecha y su aliados centristas a la iniciativa.
El Consejo de Ministro aprobó este lunes un proyecto de ley y lo envió el Parlamento, para convocar al pueblo a decidir en un referendo si acepta o no una asamblea constituyente y para que el Congreso adicione a la carta magna vigente la opción de la asamblea constituyente.
La consulta ciudadana se realizará el 2 de octubre próximo en forma simultánea a las elecciones regionales y municipales, sin interferir en estas y con una boleta aparte, mientras el Ejecutivo dejó el asunto en manos del Legislativo.
Por su parte, la comunicadora y analista Laura Arroyo desestimó el argumento de que encuestas utilizadas para mostrar que hay rechazo a una nueva carta magna y acotó que recientes protestas sociales exigieron el cambio de la ley fundamental.
Tras señalar que la mayoría de los medios de prensa han soslayado esos hechos, advirtió que “No se borra un tema por no hablar de él, sino que se agudiza”.
“Nada mejor que abrir el debate porque hay voces que exigen que este debate se abra. Y, por cierto, sí tan seguros están de que este no es un pedido mayoritario, pues no se preocupen y duerman tranquilos que seguramente ganará el no, ¿verdad?”, añadió.
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