Relata que el investigador Christopher Bouzy, fundador de la página web botsentinel.com, dio la voz de alarma: de la noche a la mañana nombres de la política estadounidense vinculados al Partido Republicano y asociados a la extrema derecha alcanzaron picos de incondicionales nunca vistos en Twitter.
Por otro lado, políticos demócratas perdieron un número importante de adeptos. El comportamiento, que causa preocupación, también llegó a Brasil.
Según lula.com.br, entre lunes y martes Bolsonaro ganó más de 65 mil seguidores en la plataforma.
Resulta que, de este total, 19 mil 999 se crearon el propio martes, y otros 17 mil 923 salieron a la luz el lunes.
En otras palabras: el 58 por ciento de los prosélitos recientes del exmilitar son cuentas que hasta hace unos días ni siquiera existían.
«Me preguntan si estas nuevas cuentas que empezaron a seguir a Bolsonaro son orgánicas y la respuesta corta es no», explicó Bouzy.
Dijo no creer que «decenas de miles de brasileños hayan decidido crear nuevas cuentas al mismo tiempo para seguirle porque (multimillonario sudafricano-canadiense naturalizado estadounidense) Elon Musk haya comprado Twitter».
Para el sitio, no es de extrañar que Bolsonaro, quien «miente siete veces al día recurra a técnicas espurias para seguir siendo relevante. Ni siquiera es noticia que la milicia digital dirigida por el genocida utilice este truco, por demostrar, de comprar robots y crear perfiles falsos».
Ya en 2020, refiere, la red social Facebook envió a la Comisión Parlamentaria Mixta de Investigación de fake news (noticias falsas) informaciones que mostraban que una de las páginas para ataques virtuales y estimular el odio contra supuestos opositores, la borrada Bolsofeios, fue creada desde un ordenador ubicado en la Cámara de Diputados.
Tal espacio fue registrado desde un teléfono utilizado por Eduardo Guimarães, secretario parlamentario del diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del gobernante.
Lula.com.br recuerda además que el año pasado, la Policía Federal (PF) descubrió que la cuenta de Instagram Bolsonaro News, retirada por Facebook ante contenidos falsos, tenía acceso a la wifi del Palacio del Planalto (sede del Poder Ejecutivo) y de la casa del jefe de Estado en Río de Janeiro.
También, según la PF, cuentas falsas creadas en Facebook e Instagram, utilizadas para atacar a opositores al gobierno y a miembros del Poder Judicial, fueron accedidas mil 45 veces desde ordenadores de organismos, como el Senado, Diputados, la alcaldía de Río, la Presidencia de la República y el Comando de la Brigada de Artillería Antiaérea.
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