«Le pido a Dios que nos acompañe, que nos brinde el discernimiento, para tomar las decisiones correctas en beneficio del mayor número de compatriotas», resaltó Chaves al recibir del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) las credenciales que oficializan su elección como próximo presidente, cargo que asumirá el 8 de mayo.
Chaves, quien invocó varias veces a Dios en su discurso para que le de fuerza y sabiduría en la conducción de los destinos de esta nación, lo volvió a mencionar para que como sociedad puedan reencontrarse con la identidad nacional y la vocación de convivencia respetuosa, pacífica.
También, para dejar de estar unos frente a otros y más bien juntarse y unirse para hacer crecer este país conjuntamente.
Agradeció a quienes votaron y trabajaron en su elección, quienes depositaron su confianza en él y les dijo que «haremos lo imposible por no defraudarlos», a la vez que también dió las gracias a los que no sufragaron por él o se abstuvieron. «Hemos escuchado su voz y les vamos a demostrar que esto es un proyecto de la democracia costarricense», subrayó.
Destacó que la ciudadanía de este pueblo -que amo- me honra luego de que 47 hombres y una mujer ejercieran ese cargo de servicio y refirió que «jamás, jamás, pensé que podría tener el honor de recibir ese nombramiento de parte de mis compatriotas».
Con la entrega de las credenciales a Chaves y a sus vicepresidentes electos, Stephan Brunner y Mary Denisse Munive, el TSE dió por concluido el proceso comicial 2022 en Costa Rica, cuya elección presidencial ganó Chaves, del Partido Progreso Social Democrático, con el 52,8 por ciento de los votos válidos depositados en el balotaje del pasado día 3.
La presidenta del TSE, Eugenia Zamora, aseguró que esas credenciales constituyen un mandato pleno de significado y responsabilidad, porque en ellas están depositadas las aspiraciones, frustraciones y desvelos de millones de compatriotas.
Asimismo, sostuvo, el anhelo de todos de que esta pueda seguir siendo una tierra donde sea posible vivir, ver crecer a nuestros niños y envejecer, en paz y libertad.
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