La Media Luna Roja precisó en un comunicado que el número de lesionados, 22 de los cuales fueron trasladados a los hospitales, pude aumentar en las próximas horas debido a las cargas de los uniformados contra los miles de fieles musulmanes presentes en el lugar.
La policía utilizó gases lacrimógenos y balas de goma para dispersar a los palestinos, muchos de los cuales respondieron con piedras.
El cuerpo armado anunció que tres personas fueron arrestadas, dos por lanzar piedras y una tercera por incitar a sus compatriotas.
En las dos últimas semanas las tensiones escalaron en torno a la Explanada de las Mezquitas tras las sistemáticas incursiones israelíes para desalojar a los musulmanes con el objetivo de permitir la entrada de los judíos con motivos del Pesaj, una fiesta que simboliza el comienzo del éxodo de ese pueblo.
Los ataques fueron duramente criticados por los países musulmanes, incluidos aquellos que mantienen relaciones diplomáticas con Israel como Jordania.
Ante la ola de enfrentamientos y condenas internacionales, Tel Aviv anunció que prohibirá a los no musulmanes visitar el complejo religioso hasta el fin del Ramadán, mes sagrado para los musulmanes, que concluye este año en 1 de mayo.
El sitio sagrado es venerado tanto por musulmanes, que lo llaman Explanada de las Mezquitas, como por judíos, que lo conocen como el Monte del Templo.
Según los acuerdos alcanzados hace décadas, a estos últimos solo se les permite visitar el lugar con numerosas condiciones, pero no rezar.
Sin embargo, bajo la creciente presión de los sectores de la derecha y ultraortodoxos aumentó el número de fieles de esa religión que intentan orar allí, lo cual es considerado por los musulmanes una provocación.
El primer ministro israelí, Naftali Bennett, afirmó en julio último que sus compatriotas tienen derecho a rezar allí, aunque días después su Gobierno reculó ante los numerosos cuestionamientos.
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