El coronel Luis Carlos Guzmán, jefe de esa fuerza, dijo a la revista Juventud Técnica que actualmente dos brigadas trabajan en ese lugar.
«Pero es una labor en la que no nos podemos desesperar, y en las que tenemos que extremar las medidas de seguridad, a partir del el alto riesgo que tiene esa actividad que se está desarrollando», comentó.
El oficial destacó la preparación del personal en ese sentido y reiteró que la prioridad sigue siendo la búsqueda de posibles sobrevivientes.
«Seguimos trabajando en las proximidades del edificio de vivienda colapsado y el hotel. En ese espacio que queda en el medio. Por las informaciones de los vecinos, ahí debe haber dos compañeros bajo los escombros, una mujer y un hombre, residentes del edificio», explicó.
Según el coronel, el personal especializado labora en todas las áreas que marcó la técnica canina, el radar y los trabajadores voluntarios.
Sobre el posible drenaje de la piscina, dijo que aunque se valora esa posibilidad ello no constituye la prioridad en este momento.
Rescatistas y bomberos hallaron en las últimas horas seis cuerpos sin vida bajo los escombros luego de la explosión del hotel el pasado 6 de mayo.
Antes de esta información, la cifra oficial de víctimas del accidente era de 35 fallecidos y 85 lesionados.
Hasta el momento, se presume que la mayor cantidad de desaparecidos se encuentren en el sótano y subsótano del inmueble.
El oficial aseguró que los trabajos de remoción de escombros y rescate de víctimas se realizan con extrema precaución pero sin interrupciones, y no se darán por concluidos hasta encontrar a la última persona que pudiera permanecer atrapada.
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