Según las estadísticas del Buró Nacional de Estadísticas, de manera general el valor de los alimentos subió 0,9 puntos y la carne de cerdo -de mayor consumo en el país- ascendió 1,5.
Los precios de los artículos no alimentarios subieron un 2,2 por ciento y los de la gasolina, el diésel y el gas licuado aumentaron 29; 31,7 y 26,9 respectivamente.
En tanto, la inflación mayorista en el sector industrial avanzó ocho por ciento y el dato fue ligeramente inferior al de marzo gracias a las medidas para frenar el encarecimiento de las materias primas y la energía.
Desde abril el Buró alertó que la inflación podría dispararse hasta por encima de los dos puntos, pues el país sigue bajo el asedio del rebrote de la Covid-19 y varios sectores socioeconómicos sufren interrupciones.
Para el presente año China se plantea cerrar ese indicador en alrededor de tres puntos.
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