Gao Fu, director del Centro nacional de Control y Prevención de Enfermedades, dijo que con esos pasos se busca también actualizar el plan de inmunización ante la continua mutación del coronavirus SARS-CoV-2 y el surgimiento de variantes más transmisibles, como la Ómicron.
No obstante, remarcó que actualmente la prioridad es completar la vacunación básica (doble dosis) en todos los habitantes del país y especialmente entre los vulnerables.
China tiene más del 88,7 por ciento de su población inmunizada contra la Covid-19 y 757 millones de ciudadanos ya disponen de la inyección de refuerzo.
Sus autoridades mantienen la política de tolerancia cero a la enfermedad, pero con el actual rebrote reajustaron muchas de las medidas sanitarias, comenzaron a importar una pastilla de la firma estadounidense Pfizer y autorizaron los ensayos clínicos de dos vacunas domésticas para proteger de la Ómicron.
Este lunes Shanghái levantó el confinamiento en la mayor parte de su territorio, reabrió más negocios y anunció la vuelta por completo a la normalidad para junio.
Mientras, Beijing endureció el control epidemiológico en los distritos de Chaoyang, Haidian y Fangshan, procedió con más pruebas PCR a diario, la vigencia del teletrabajo, las clases en línea y la suspensión del transporte y actividades públicas.
El gigante asiático acumula al menos 15 mil 642 muertos y un millón 322 mil 193 casos confirmados en su parte continental, Hong Kong, Macao y Taiwán desde el surgimiento de la patología y del coronavirus que la provoca en diciembre de 2019.
Aparte, 52 mil 798 asintomáticos están bajo observación médica.
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