En su plataforma programática señala que las colombianas son guardianas del agua y de la tierra fértil, defensoras del territorio y de la biósfera, cuidadoras y tejedoras de la vida y la paz, bastiones de la economía.
Además, añade que para que Colombia sea una Potencia Mundial de la Vida (eslogan de la campaña del Pacto) el cambio será con las mujeres.
«Junto a ellas emprenderemos las transformaciones para saldar la deuda en términos de representación política, igualdad y autonomía económica frente al hombre, el derecho a una vida libre de violencias, a decidir sobre sus cuerpos y a realizar un proyecto de vida próspero y autónomo», enfatiza.
Agrega que para transitar a una democracia profunda requerirá la representación real de la mitad de la población colombiana.
En tal sentido, precisa que las mujeres ocuparán, al menos, el 50 por ciento de todos los cargos públicos en todos los niveles y las ramas del poder, que permitan potenciar la toma de decisiones en favor del cambio.
Acerca de la presencia de las féminas en el sistema educativo, indica que se cerrará las brechas de género y fomentará capacidades de liderazgo de las mujeres a lo largo de todas las etapas de la vida, combatiendo estereotipos que reproducen la desigualdad.
Entre otros aspectos, recalca que, en su gobierno, de ganar las presidenciales del próximo día 29, garantizará espacios seguros y libres de violencia para la participación política del sector femenino.
«Toda la institucionalidad y los programas de política estarán orientados por una perspectiva de género de carácter interseccional, que reconozca a las mujeres en su diversidad étnica, cultural, sexual y de género, ciclo vital y nivel de ingresos», subraya.
Añade que las mujeres tendrán prioridad y especial protección para acceder a las políticas de empleo, vivienda, tierra, salud y educación.
También tiene en cuenta el papel de la mujer cuidadora, el empleo decente que será garantizado, así como la igualdad salarial a igual trabajo frente a los hombres.
De igual forma, entre otros aspectos subraya que, para transitar por fin hacia una era de paz, Colombia debe brindar verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición para la mujer y las diversidades de género y sexuales en el marco del conflicto social y armado.
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