Bandas musicales acompañaron la marcha que inundó las principales avenidas de Puerto Príncipe y otras ciudades del país con cánticos e himnos, y vestidos con prendas de rojo y azul, las dos bandas que representan la unión nacional.
“La bandera nos une”, dijo a Prensa Latina Marie, que con solo siete años acompañaba la nutrida movilización junto a sus padres. Esta escena también se repitió en países como República Dominicana o Estados Unidos, hogar de cientos de miles de migrantes haitianos.
Como figura central del desfile una mujer portaba la bicolor en alto, recordando el papel de las féminas en la sociedad y en la lucha por la libertad.
En 1803, los independentistas Jean Jacques Dessalines y Catherine Flon dieron vida a la bandera de Haití, tras sustraer la franja azul de su par francesa, y desterrar así todo vestigio colonial.
Flon quien fuera enfermera, estratega militar y luego heroína, fue seleccionada para coser la primera bandera en Arcahaie, conocida como la ciudad de la independencia, al proclamarse allí el fin del colonialismo francés.
Las franjas azul y roja simbolizaban a la población negra esclavizada y a los mulatos criollos, ahora pertenecientes a un mismo pueblo.
La insignia sufrió varias modificaciones en sus más de dos siglos de existencia, y en 1986, tras la caída de la dictadura de Jean Claude Duvalier, se adoptó la que hoy ondea en cada rincón del país.
A propósito de los festejos el primer ministro, Ariel Henry, recordó que la bicolor fue fruto de un consenso nacional, y con lo cual debía inspirar a todos los ciudadanos a desterrar las divisiones y redescubrir el espíritu unitario, en aras de la estabilidad nacional.
“Es imperativo fortalecer el marco de diálogo permanente, institucional, inclusivo entre los haitianos, con miras a compartir los ideales de convivencia, del bien común, del amor a esta tierra que nos es tan querida y por la cual tenemos el deber de reconstruir juntos”, aseguró el jefe de Gobierno durante una ceremonia en Arcahie.
También reiteró que el símbolo patrio podría ayudar al país a avanzar, pues el futuro de sus hijos depende de la cooperación de todos.
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