A pocos días de que ocurriera ese violento hecho, que también dejó saldo de ocho soldados muertos y 13 heridos, el ministro de Seguridad, Damehame Yark, manifestó este jueves que el presidente del país, Faure Gnassingbé, dio instrucciones de no ceder ni un milímetro territorial ante los grupos extremistas.
Según el diario digital Republique Togolaise, la embestida de entes radicales, los cuales operan en la frontera de este estado de África occidental con Burkina Faso, tuvo lugar en la prefectura de Kpendjal.
Con anterioridad, la Unión Africana condenó el atentado contra el puesto militar de las Fuerzas Armadas de Togo, al que calificó como acto terrorista.
Reiteró también el pleno apoyo y la solidaridad del organismo continental al gobierno y al pueblo de Togo en su búsqueda de la paz y la estabilidad.
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