Hasta el sábado las sociedades especializadas, comunidad de auxiliares asistenciales, hospitales públicos y privados, y las clínicas realizan un paro laboral para reclamar a las autoridades el derecho a disfrutar de la libertad, y de tratar y salvar vidas humanas en paz y tranquilidad, escribieron en un comunicado.
La Sociedad condenó el secuestro de la pediatra Bennety Augustin, retenida contra su voluntad desde el 5 de mayo, pese a que se abonó en rescate, según confirmaron sus familiares, e invitó a los responsables de los hospitales que se solidarizan con el movimiento a crear una célula de emergencia para casos extremos.
Augustin fue secuestrada en Laboule, mientras se dirigía al Hospital Sant Damien. Los residentes de la zona improvisaron una movilización para denunciar el caso, bloquearon los accesos y erigieron barricadas de neumáticos en llamas.
Tres días antes el doctor Wilbert Cadet en Delmas 75 fue incautado cerca del Hospital Espoir, y el martes último fue el turno de Jacques Pierre Pierre, director médico de la Hospital Universitario Estatal de Haití, la institución pública más importante del país.
Estos casos aumentaron de manera vertiginosa desde el pasado año, cuando se registraron más de un millar, en especial en la zona metropolitana de la capital, mientras en lo que va de año organizaciones de derechos humanos reportaron al menos 200 raptos.
Las autoridades reiteraron recientemente su compromiso con frenar la violencia y el crecimiento de las bandas armadas, que también provocó cientos de muertes y más de nueve mil desplazados internos.
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