Según un parte de las Fuerzas Armadas y de Seguridad Interna, las acciones contra agrupaciones radicales, efectuadas en el período comprendido del 15 de abril al 15 de este mes, tuvieron lugar, sobre todo, en zonas del Norte, Este y Suroeste del territorio nacional.
Tras denunciar que en su retirada ante el empuje de las fuerzas militares los terroristas tomaron represalias contra poblaciones civiles, el organismo precisó que en la actual etapa el Ejército intenta reducir las capacidades del enemigo en zonas clave.
De acuerdo con el portal digital Burkina 24, las tropas gubernamentales concentran sus esfuerzos, con ofensivas constantes, en los grandes ejes definidos por el Comando de Operaciones del Teatro Nacional para mantener la presión sobre las formaciones insurgentes.
Burkina Faso, país donde el pasado 24 de enero fue depuesto por un golpe de estado militar el presidente Roch Marc Christian Kaboré, experimentó en los últimos meses un fuerte repunte de la violencia.
Dentro de zonas burkinabesas como Barsalogho (Región Centro-Norte) y Djibo, en la región del Sahel, desde 2015 las Fuerzas de Defensa y Seguridad combaten a grupos extremistas, los cuales intentan capturar nuevos territorios.
Mediante sus acciones beligerantes desde hace siete años, tales entes, entre ellos el Estado Islámico ligado a la red Al-Qaeda, causaron en este territorio mil 200 muertes y provocaron el desplazamiento de más de 1,8 millones de civiles, según datos gubernamentales.
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